Toda operación de comercio exterior, tanto nacional como internacional, lleva inherente unos riesgos que son difíciles de cuantificar. Dichos riesgos han de ser evaluados antes de acometer una operación con el exterior. Estos riesgos son motivados por las distintas situaciones políticas y económicas de un país, la legislación, la moneda, la distancia geográfica, el idioma, las documentaciones comerciales necesarias, las obligaciones arancelarias y aduaneras, etc.
Por ello, dependiendo de todos estos factores y fundamentalmente de la confianza que haya entre las partes respecto al cumplimiento de sus obligaciones, se elegirá un medio u otro.
Presentamos los diferentes medios de pago dependiendo de la posición que ocupe nuestro cliente, es decir si es Importador o Exportador.